En el capítulo anterior hemos analizado los dos cuerpos: el terrestre y el celeste. Para cada uno de ellos hemos definido un triángulo que los simboliza y los hemos considerado como vehículos para nuestro viaje en dos mundos: el verde y el celeste.
El mundo verde, el terrenal, lo conocemos. Ahora ha llegado el momento de analizar el otro mundo, el celeste. Desde antiguo se ha hablado de él. En las distintas tradiciones y religiones hay menciones concretas. Lo encontramos en la sabiduría de oriente, en la tradición Judía, en la Biblia, en Dante, en San Agustín, en el Corán, entre otros.
En Oriente se habla del axis mundi que conecta dos extremos (el cielo y la tierra).
En la tradición Judía se habla del vehículo Mercaba que permitía transportar el espíritu a otras dimensiones, a otras realidades en las cuales se tenían otras percepciones del tiempo y del espacio.
En la Biblia, podemos mencionar entre otros tantos:
- En el Génesis 28: 12 y 13 Jacob tiene una visión en un sueño, ve una escalera por la cual los ángeles subían y bajaban del Cielo.
- En el Evangelio según San Juan 18,36. Jesús le contesta a Pilato: "La realeza mía no pertenece al mundo éste. Si perteneciera al mundo éste esa realeza mía, mi guardia personal habría luchado para impedir que me entregaran en manos de las autoridades judías. Ahora que la realeza mía no es de aquí."
- En el Evangelio según San Juan: capítulo 1, 51, Jesús dice a sus discípulos: "Sí, os aseguro que veréis el cielo abierto y a los ángeles de Dios subir y bajar por este Hombre".
- En el Apocalipsis (2:7) dice: "Al que salga vencedor le concederé comer del árbol de la vida, que está en el jardín de Dios".
Dante en la Divina Comedia, también hace clara referencia al mundo celeste. Lo veremos más adelante en este capítulo.
San Agustín nos habla de LA CIUDAD DE DIOS.
En El Corán Mahoma, hace referencia al Elaraf, una muralla colocada entre le paraíso y el infierno.
¿Pero en qué consiste este mundo celeste?. ¿A qué leyes está sujeto?. ¿Cómo entender ese mundo suprasensible si no tenemos los órganos adecuados?.
LAS PARABOLAS, LAS METAFORAS, COMO ES ARRIBA ES ABAJO
Decíamos que existen dos mundos el terrestre y el celeste. El terrestre lo percibimos a través de los sentidos físicos, y de nuestra mente racional. Para tratar de entender al otro mundo San Pablo nos indica que es necesario expresar las cosas espirituales en lenguaje espiritual, porque las verdades espirituales se aprecian a partir de una experiencia espiritual; en cambio, el que permanece en la razón terrenal no es receptivo a las realidades de los planos suprasensibles (1ª. Cor. 2:13).
De este modo, para comprender a este nuevo mundo celeste, no podremos utilizar el método científico, el estudio directo y el conocimiento de las ciencias físicas. Un hombre que se rija solamente por sus sentidos físicos, no podrá acceder a este reino. Pero si en cambio, abre sus otros sentidos, podrá ver una puerta que se abre ante él y una luz superior comienza a iluminar su mundo. Así un nuevo conocimiento podrá ser adquirido. Esto exige una apertura mental tal, que deje a un lado el conocimiento adquirido para no mezclarlo con el nuevo conocimiento. En la Biblia dice que el vino nuevo no puede ponerse en viejos odres. Tampoco nosotros debemos mezclar estos nuevos conocimientos con los antiguos. Pertenecen a dos mundos separados, si bien el conocimiento de uno nos ayudará a entender el otro.
Para entender este nuevo mundo será necesario expresarnos a través de símbolos, de metáforas, de parábolas. Estos nos permitirán, utilizando los objetos visualizados por los sentidos físicos, expresar lo invisible. De este modo, nosotros observando nuestro mundo material (abajo) podremos inferir conocimientos del plano invisible o mental espiritual (arriba), captando las verdades del mundo celestial.
Por esto Jesús hablaba utilizando parábolas, utilizaba las imágenes terrestres que eran de conocimiento de todos sus oyentes para luego crear la analogía correspondiente con las visiones celestiales.
Este sistema es conocido desde antiguo como el Principio de Correspondencia y dice: "Como es arriba es abajo; como es abajo es arriba". De este modo si entendemos el funcionar de una ley en un plano podemos trasladarla a otro plano distinto y comprobar su vigencia, pues ciertas leyes actúan en todos los planos.
Fue así que, sin saberlo, y aplicando este principio, los científicos se han puesto a estudiar de un modo especial a las hormigas. Dice un artículo de un periódico "HORMIGAS Y ORGANIZACIÓN": Actualmente se estudia en Francia la vida de las hormigas, pues se descubrió que tienen un concepto de organización muy útil para manejar empresas y grandes conglomerados humanos.
LAS DISTINTAS VISIONES DEL MUNDO CELESTE Y DEL TERRESTRE
El mundo total, que implica la suma del mundo terrestre y el celeste, ha sido visto de diversas maneras, entre ellas:
1. Como un gran mundo dividido en dos mitades.
2. Como un gran mundo de fuerzas encontradas.
3. Como un gran mundo con cuatro regiones.
4. Como un mundo dividido en diversos planos.
5. Como una gran matriz de siete niveles con dos columnas.
COMO UN GRAN MUNDO DIVIDIDO EN DOS MITADES
El universo, el "gran mundo" se lo consideraba dividido en dos mitades. Así la tradición cuenta que el "Huevo del Mundo", se separó en dos mitades que pasaron a formar respectivamente el Cielo y la Tierra.
NOMBRES DE CADA MITAD
A la primera mitad, la inferior o material, se la ha llamado:
- Mundo sensible
- Mundo infernal
- Territorio del Diablo
- Mundo material
- Mitad inferior del Huevo Cósmico
- Tierra
- Mundo verde
A la otra mitad, la superior, a ese nuevo mundo, se la ha denominado:
- Mundo suprasensible
- Mundo astral
- Mundo mental
- Mundo espiritual
- Mundo invisible
- Mundo inmaterial
- Mundo energético
- Reino de los Dioses
- Mundo de los Dioses
- Cuarta coordenada
- Universo Cósmico
- Techo del cielo
- Cosmos
- Mundo mágico
- Mitad superior del Huevo Cósmico
- Cielo
- Mundo celeste
La diversidad de nombres dados a estos mundos, se debía a que cada autor quería destacar determinados aspectos que consideraba relevantes para su visión de mundo. Vemos así que algunos destacan el aspecto de "los Dioses", otros lo "inmaterial", y otros lo "mágico" de la experiencia en este nuevo mundo.
MOTIVOS DE ESTA DIVISION DEL UNIVERSO
Esta división del mundo en dos mitades, buscaba reflejar los dos polos de la Creación: el polo positivo y el negativo. Es una simplificación, pero de mucha utilidad. Ya decía Jung que materia y espíritu son las dos caras de una misma moneda, dado que ambas están contenidas en el mismo mundo. Consideraba así al espíritu como lo opuesto a la materia. Existía de este modo un mundo material percibible a través de los sentidos (mundo sensible) y un mundo suprasensible.
Esta simplificación surgía de la aplicación de dos principios herméticos que eran conocidos desde antiguo: el principio de Polaridad y el de Vibración.
El Principio de Polaridad lo hemos visto en el capítulo tercero, y afirma: "Todo en doble: todo tiene dos polos; los opuestos son Idénticos en naturaleza, pero diferentes en grado. Lo graficamos del siguiente modo:
Y el Principio de Vibración que afirma: nada está inmóvil; todo se mueve; todo vibra. El espíritu es uno de los polos de la vibración, constituyendo el otro polo formas de materia extremadamente densas.
Entonces aplicando estos principios armoniosamente afirmaban que el Universo tenía dos polos: el polo inferior correspondía al plano material, plano de la vibración más baja, y en el otro extremo, en el polo superior, se encontraba la vibración máxima, plano espiritual o "techo del cielo". Gráficamente:
COMO UN GRAN MUNDO DE FUERZAS ENCONTRADAS
A esta visión del mundo como fuerzas encontradas, en pugna entre ellas, se le dio el nombre de Maniqueísmo. Este nombre proviene de la visión creada por Maní y, como Iglesia, no sobrevivió largo tiempo; sin embargo el nombre es de gran actualidad, pues identifica a todas las teorías o filosofías que de algún modo contraponen fuerzas del Bien luchando contra las del Mal, como principios contrapuestos.
Su creencia consistía básicamente en que al comienzo coexistían Dios y la materia (Satanás). Cada uno tenía su reino claramente delimitado. El primero estaba formado por la tierra de la luz que se extendía al norte, en el infinito, todo era paz y pureza; y estaba constituido por cinco moradas: inteligencia, razón, pensamiento, reflexión y voluntad. Dios, el Padre, reinaba en él. El segundo era la tierra de Tinieblas que se encontraba al sur, en el infinito. Allí todo era desorden, estupidez y hedor; y estaba constituido por cinco remolinos: humo, niebla, fuego devorador, aire y viento destructor. En él reinaba Satanás.
Hoy está claro que visiones de este tipo llevan a ver al mundo en términos absolutos y peligrosos.
COMO UN GRAN MUNDO CON CUATRO REGIONES
Esta es la visión que lo divide en cuatro partes: La tierra, lugar de la experiencia humana, y los sectores del Infierno, Purgatorio y Paraíso, lugares hacia donde se dirigirá el alma de acuerdo a su experiencia terrena. Esto ha sido reflejado por el poeta más grande de Italia, Dante Alighieri, quien en su obra La Divina Comedia, nos presenta el Infierno, el Purgatorio y el Cielo y sus particularidades.
COMO UN MUNDO DIVIDIDO EN DIVERSOS PLANOS
Como una evolución de la teoría del mundo dividido en dos mitades, surgió la necesidad de entender al mundo celeste como dividido en distintos planos.
Esta teoría parte de la aplicación del Principio de Vibración que enseña que todo el universo vibra en diversas frecuencias. Por aplicación de este principio y para poder diferenciar estos diversos grados de energía, desde antiguo se ha dividido al Universo en siete grandes planos. El plano inferior, es el más denso y el superior el más sutil. Así cada plano tiene una vibración determinada que lo caracteriza.
LA ANTIGUA DIVISION EN SIETE PLANOS
En una interesante división entre los planos se afirmaba que, desde el más denso al más sutil de los planos, estaban divididos del siguiente modo:
- Plano uno: mundo visible, terrenal, mortal, transitorio. Es el plano sólido, regido por el elemento tierra.
- Plano dos: mundo del más allá, o astral inferior. Es el plano regido por el elemento líquido.
- Plano tres: mundo del fuego, infierno, o mundo de la ira. Es el plano regido por el elemento fuego inferior.
- Plano cuatro: mundo sin fuego, o mundo de la misericordia. Es el plano regido por el elemento aire.
- Plano cinco: Mundo del fuego del corazón de Cristo. Luz del Paraíso. Cámara externa, o antecámara.
- Plano seis: Cielo de los ángeles o mundo del amor. La Jerusalem celeste, la cámara interna.
- Plano siete: el cielo de todos los cielos. La unidad. El santísimo. El techo del cielo.
Este modo de dividir al cielo lo encontramos en los Escolásticos, en Dante, en el Corán, entre otros. Las doctrinas de los escolásticos, tenían una visión del Sistema Cósmico que lo dividía en 10 cielos. También Dante hace una división del Sistema en diversos planos: Divide al infierno en 9 círculos, el Purgatorio en 7 círculos y finalmente al Paraíso en 10 cielos.
En el Corán, Mahoma, habla de una división del cielo en siete cielos: "Él ha formado los siete cielos colocados unos sobre otros" (Sura LXVII,3) y "Hemos edificado encima de vuestras cabezas siete cielos sólidos (Sura LXXVIII, 12).
Presentamos a continuación una antigua división del mundo en siete planos positivos y siete negativos. De este modo aparecían siete cielos y siete infiernos. La clasificación era:
Vemos entonces que en algunas divisiones de mundo, el plano terrestre es visto como el polo inferior, como el más bajo. En otras como contrapartida de un mundo celestial, existe un mundo infernal.
COMO UNA MATRIZ DE SIETE NIVELES CON DOS COLUMNAS
A partir de aquí iremos explicando nuestra visión de mundo como una matriz de siete niveles con dos columnas. Esta y sus leyes serán la base teórica para nuestro desarrollo Alquímico.
DIOS ESTA POR FUERA DE ESTOS PLANOS
Según el Genesis 1,1: Al principio creó Dios el cielo y la tierra.
La tierra era un caos informe; sobre la faz del abismo, la tiniebla. Y el aliento de Dios se cernía sobre la faz de las aguas.
Dijo Dios;
- Que exista la luz.
Y la luz existió.
Vio Dios que la luz era buena; y separó Dios la luz de la tiniebla: llamó Dios a la luz "día" y a la tiniebla "noche".
Agreguemos Genesis 2,9 que dice: "El Señor Dios hizo brotar del suelo toda clase de árboles hermosos de ver o buenos de comer; además, el árbol de la vida en mitad del parque y el árbol de conocer el bien y el mal".
De este modo la Biblia aclara que: Dios es el "creador" del cielo y de la tierra. De este modo Dios está por fuera de la creación. Esto nos aleja de cualquier visión maniqueísta. Dios no es una de las fuerzas en conflicto, es el creador de todas las fuerzas. Así crea todo los planos de nuestro universo. Dios crea los conceptos de dualidad en los cuales nos movemos. Cuando Dios dice "Que exista la luz", está creando el mundo de dualidad. Lo hace separando la luz de las tinieblas (Genesis 1,4), Luz y oscuridad, Bien y Mal. Crea así el mundo de los opuestos. Esto se aplica a los distintos planos, e incluso al interior del ser humano. Otra referencia al mundo de los opuestos es a través del árbol de conocer el Bien y el Mal. De este modo el hombre puede conocer los conceptos: día-noche, bien-mal. Ahora sí, dentro de ese mundo dual, creado por Dios, el hombre se encontrará con el mundo de la luz, y el de la oscuridad. Esta lucha interior del hombre en el mundo de la dualidad se simboliza con la lucha del Héroe de la luz contra el Dragón de la tinieblas.
LEYES DE LOS DISTINTOS PLANOS ENERGÉTICOS
Hecha esta aclaración, y partiendo de la división de mundo en siete niveles, podemos definir algunas leyes.
EXISTEN SIETE NIVELES
En el universo existen siete niveles de existencia de acuerdo a su vibración. El nivel inferior, es el más denso y el superior el más sutil. Así cada nivel tiene una vibración determinada que lo caracteriza.
Este es el verdadero territorio en el cual nos moveremos con nuestros triángulos. En estos siete niveles se desarrolla la lucha de la evolución personal.
CADA NIVEL CONTIENE AMBAS POLARIDADES
Esto es la aplicación del Principio de Polaridad visto en sentido horizontal.
En cada nivel encontraremos energía que se manifiesta de un extremo al otro: mostrando los dos polos. En un extremo lo negativo y en el otro lo positivo. Por lo tanto existen energías positivas y negativas dentro de cada nivel, que corresponden a determinada distribución.
Esto se reflejará en cada uno y en todos los niveles vibratorios. Es posible transitar dentro de cada nivel de un modo horizontal, de un extremo al otro de la polaridad.
Con esta visión entenderemos que en un nivel determinado puedan coexistir, y llegado el caso oponerse, fuerzas positivas y negativas. Si en cada nivel se aplica esta ley, veremos como se van oponiendo horizontalmente el mundo de la luz, el extremo positivo, y el de las tinieblas el negativo. Así, y en coincidencia con el antiguo saber, podremos conocer distintos cielos e infiernos en cada nivel.
LEY DE LA DISTANCIA
Cuanto mayor sea la cercanía de una energía respecto a un objeto o ser, mayor será su influencia vibracional sobre el mismo. Cuanto mayor sea su distancia menor será su influencia.
LEY DEL PLANO UNO
Este es el nivel, el del mundo verde, el mundo terrenal, el mundo de la dualidad, del cual ya hemos hablado en extenso. Este es el nivel donde a través de nuestros sentidos podemos ver claramente la aplicación de la ley que dice "que en cada nivel contiene ambas polaridades".
Este es el nivel clave desde donde podemos y debemos efectuar nuestro crecimiento y desarrollo como seres humanos. Aquí debemos actuar de un modo activo, y no buscar evitar los eventos de este plano. Es con nuestra manifestación en la tierra que lograremos superarnos como seres: pasar del plomo al Oro.
Es entonces en el mundo terreno, como ejemplo de polo positivo, en un extremo, al ser humano puro, libre del pecado. En el otro extremo en el polo negativo al hombre pecador, hombre dominado por el egoísmo, pasando de un extremo al otro por todas las variantes posibles dentro de la condición humana. Gráficamente:
Este nivel está muy cargado negativamente, y en la tradición es conocido como el territorio del Diablo. Aquí se produce la manifestación física de las oposiciones energéticas que se van realizando en los distintos niveles. Pero estas oposiciones o luchas son pequeñas manifestaciones respecto a las que se producen en los otros niveles.
De este modo el mundo físico en que vivimos depende y está ordenado por el mundo suprasensible. Por esto el Padre Nuestro comienza diciendo "Padre Nuestro que está en los cielos...". Es él que nos dio vida y que rige nuestro mundo sensible. A sus leyes estamos sometidos, independientemente de nuestra voluntad.
Esto se manifiesta en las leyes de "la interpenetración", de la "causa de plano superior" y de la ley "del ocultamiento".
LEY DE LA INTERPENETRACION
Todo nivel superior interpenetra energéticamente a los niveles que se encuentran debajo de él, sin mezclarse con ellos, mantiene así sus características.
LEY DE CAUSA DE NIVEL SUPERIOR
Desde el Techo del mundo hacia abajo, cada nivel produce efectos sobre los planos inferiores a él. Así el mundo superior es a su vez generador y causante de su inmediato inferior. Por este motivo lo que sucede en los niveles inferiores es el resultado de cómo reciben lo superior. Esto implica que una fuerza originada en un nivel superior puede imponer su voluntad a una fuerza de un nivel inferior de igual o menor magnitud.
LEY DEL OCULTAMIENTO
Desde un nivel inferior no es factible conocer en forma directa un nivel superior. Debido a esto, cada nivel superior es un ocultamiento de su estado precedente o inferior.
LEY DEL PENDULO
En cada nivel de existencia estamos sujetos a la ley del péndulo, o ritmo, que afirma: "Todo fluye y refluye; todo tiene su periodo de avance y retroceso; todo asciende y desciende; todo se mueve como un péndulo; la medida de su movimiento hacia la derecha, es la misma que la de su movimiento hacia la izquierda; el ritmo es la compensación. Las cosas que uno obtiene siempre las paga con las que pierde." Para escapar a los efectos de esta ley, es necesario elevarse al nivel superior. De este modo, y por aplicación de la "Ley de Causa de Nivel Superior", dejamos de ser efecto y nos convertiremos en causa, para luego operar, desde este nivel, sobre los niveles inferiores.
LEY DEL MOVIMENTO ENTRE LOS NIVELES "SOLVE Y COAGULA"
Esta ley manifiesta que es posible realizar movimientos en forma vertical dentro de los niveles. Por esto podemos movernos hacia arriba, hacia los niveles superiores, y realizar movimientos hacia abajo, hacia los niveles inferiores.
La fórmula solve y coagula se considera como conteniendo de una cierta manera todo el secreto de la "Gran Obra" Alquímica, pues como acciones complementarias de estas dos fases inversas, el ascenso y sutilización y el descenso y materialización, reproducen el proceso de la manifestación universal. Estas dos acciones o movimientos corresponden a la acción del Cielo (solve) y la reacción de la Tierra (coagula). Los chinos lo identificaban a través del yang y del yin.
LEY DEL MOTOR VIBRATORIO
A medida que varían nuestras vibraciones, estas actúan como un verdadero motor que nos impulsa hacia otros niveles. Cuando aumenta sus vibraciones nos movemos hacia niveles superiores y cuando la vibración disminuye nos movemos hacia niveles inferiores. De este modo vamos pasando por los distintos niveles, hasta que nuestra vibración nos estabiliza en determinado nivel. Veremos el motor vibratorio al analizar el Athanor.
LEY DE UN NIVEL POR VEZ
Para efectuar estos movimientos de ascenso y descenso entre los niveles, es necesario hacerlo uno por uno, pues no es factible saltear los niveles, es necesario pasar a través de ellos.
EL ESPACIO-TIEMPO RIGE SOLO EN EL NIVEL UNO
Esto implica, como todos sabemos, que siempre estamos posicionados dentro de la línea del tiempo, a un presente y dentro de las líneas del espacio a un lugar. Esta combinación de espacio-tiempo, nos tiene sujetos a sus leyes: para movernos de un lugar a otro necesitamos "tiempo", y siempre debemos movernos en la línea del tiempo hacia delante, hacia "el futuro". Por esto cuando nos manifestamos en el nivel uno, quedamos sometidos a las leyes del tiempo. Estamos operando en un punto de una línea, y por lo tanto lo anterior a este punto se convierte en pasado, y lo posterior en futuro. Así tenemos la noción de tiempo terrestre. Este punto en el que estamos no solo separa con "el presente" a los otros dos tiempos "pasado" y "futuro" sino que en su movimiento permanente "el presente" los une.
LOS NIVELES 2 A 7 ESTAN POR AFUERA DEL ESPACIO-TIEMPO
Esto es un corolario de la ley anterior, y estos niveles están por afuera del espacio-tiempo. Una vez ingresado a estos niveles desde un punto del espacio-tiempo, es factible reingresar al espacio-tiempo en otro punto de contacto (otro lugar, otro tiempo).
LEY DE LAS BASES DE INFORMACION
En cada plano existen Bases de Datos de Información, a las cuales se puede acceder en ciertas condiciones. Se las han denominado Archivos Akásicos.
LEY DE LOS OBJETOS INCORPOREOS
En cada plano es factible encontrar o construir objetos incorpóreos. En la tradición estos objetos existentes han sido mencionados como: el Olimpo, el Cielo, el Infierno o el País de las Hadas. La Biblia hace referencia a Templos Celestes. Algunos afirman que en esos planos encontraremos inmensas ciudades cuya arquitectura jamás podría ser soñada por ser el humano.
LEY DE LOS SERES INCORPOREOS
En cada nivel existen Fuerzas que toman la forma de Seres incorpóreos. De este modo, los niveles superiores están habitados por otro tipo de entidades distintas a las terrenas. Han sido representados de distintas maneras. Ángeles, demonios, Maestros ascendidos de Logias Blancas, Servidores de magia negra, hadas, elfos, silfos, gnomos, y hasta extraterrestres han sido tomados como manifestaciones de estas fuerzas. Estos seres poseen Valores. Los de valores positivos de acuerdo a su potencia y nivel que operen podrán ser hombres de buena voluntad, Maestros ascendidos, Ángeles, Arcángeles. Los de valores negativos de acuerdo a su potencia y nivel en el que operen: hombres de pecado, servidores de magia negra, demonios.
LOS SERES EVOLUCIONAN HACIA SU PERFECCION RELATIVA:
Existe una tendencia, originada en la ley de la carga, que si no es neutralizada, produce que los malos quieran ser cada vez ser más malos, y los buenos quieran ser más buenos.
LEY DE LA CARGA
Hemos dicho que en los distintos niveles existen seres y objetos, y cada uno de ellos tiene carga. Carga es el sentido de la vibración de determinada energía. Esta "carga" puede tener sentido positivo o negativo. De acuerdo a este sentido se acercarán a uno u otro polo de cada nivel. Los de carga positiva irán naturalmente hacia la luz, los de carga negativa hacia la oscuridad.
LEY DE LA POTENCIA
La potencia, o fuerza de un ser, depende de su nivel de vibración y de la cantidad de energía. Así podemos representarlo en una formula: Potencia = Vibración por Cantidad. Así cada nivel es una zona de fuerza determinada. Cuanto más alto es el nivel, mayor es la magnitud de la fuerza. Dentro de un mismo nivel, el Ser de mayor Potencia se impone al de menor potencia. Cuando se trata de fuerzas de distintos niveles, un ser que tenga igual cantidad de energía, que otro de un nivel inferior, podrá imponerle su voluntad en caso de conflicto de intereses.
LEY DEL VALOR
El valor de un ser está en función a la Potencia y a la carga del mismo. La Potencia, nos dará su fuerza, y la carga el sentido positivo o negativo de la misma. El valor nos dirá entonces cuánta fuerza y para qué la utiliza (para el bien o el mal).
LEY DE LOS DOS MUNDOS
Vivimos al mismo tiempo en dos mundos, uno exterior y visible, que está en el espacio (nivel uno) y el otro interior e invisible, que no está en el espacio (nivel 2 a 7). Por esto siempre estamos actuando en dos niveles al mismo tiempo: uno para el triángulo inferior y otro para el triángulo superior. Por esto nuestra manifestación en la tierra dependerá, no solo del lugar que estemos ocupando en el nivel uno, sino del lugar que esté ocupando el vehículo superior dentro de la matriz.
LEY DE LA SINTONÍA
La Sintonía implica acceder a una frecuencia vibratoria, similar a la que emite un ser, un lugar, o un objeto determinado. Del mismo modo que girando el dial de una radio, podemos acceder a cierta emisora escuchando aquello que emite en esa frecuencia, del mismo modo, colocándonos en sintonía con la vibración correspondiente a determinado nivel, es factible ingresar e interactuar con las energías que lo forman. Así el estar en cierta sintonía nos permite percibir las energías de ese nivel y dejar de percibir las de niveles distintos.
LEY DE LO SIMILAR SE ATRAE
Este es un corolario de la ley anterior, y se dice que el nivel del ser de una persona atrae cierto nivel de vida. Su vida es consecuencia de lo que genera, y atrae en consecuencia determinadas circunstancias una y otra vez.
Mientras no se produzca un cambio de nivel de ese hombre, su historia será la misma. Atraemos así lo similar a nosotros. Esto es verificable a nivel de una persona individual, a nivel de grupo, o a nivel de Nación. Por esto se ha comprobado que una persona que ingresa a determinados grupos, siente que pierde su individualidad y puede llegar a realizar actos que individualmente jamás se hubiese permitido realizar. Lo cual ha originado importantes estudios de comportamiento humano a nivel de Masas, especialmente por Gustavo Le Bon y Freud.
LEY DE ACCESO A DETERMINADO NIVEL (LEY DEL TEMPLO DE PASAJE)
Para acceder a determinado nivel de la matriz, se debe alcanzar la Sintonía de dicho nivel. Una vez lograda, un Templo se hace visible para nosotros y se abren sus puertas. De este modo de acuerdo a la sintonía que tengamos será el nivel al cual entraremos en contacto. Cuando nos concentramos en un nivel, cuando vibramos en un nivel, nuestra conciencia se traslada a ese nivel y será factible ingresar y quedar posicionado horizontalmente para operar en ese nivel. Desde antiguo se han identificado diversos lugares físicos que cumplen una función de “portal” a otros niveles.
Se decía que eran misteriosas puertas que se abrían para permitir el pasaje de alguien o algo de uno de los niveles al otro. Se los ha llamado templos de pasaje. Existen diversos templos de acuerdo al nivel al que se quiera acceder. Sobre estos lugares se han construido Templos “físicos”, a fin de una mejor canalización de las energías para posicionarse en el “eje ascendente-descendente” que permite moverse entre los planos. En estos casos sobre el centro exacto del portal se construyen los altares para que el sacerdote medie entre el cielo y la tierra.
La sintonía de acceso al templo puede producirse en forma voluntaria o involuntaria. La sintonía voluntaria corresponde al trabajo que realizamos para lograr esa vibración que nos permita posicionarnos en el nivel deseado. Otras veces, el ingreso se produce por una sintonía involuntaria. En esos casos sentimos que somos obligados a entrar a ese plano. Esto sucede por tres motivos principales: 1) El ingreso a zonas de energías concentradas de determinado plano energético. 2) Nuestro cambio de vibración por eventos externos. Cuando particulares circunstancias exteriores nos afectan intensamente, comenzamos a vibrar involuntariamente en la frecuencia de ese plano. 3) Nuestro cambio vibracional por encontrarnos en estados alterados de conciencia, como ser durante el sueño, el efecto de las drogas o el alcohol. En estos casos la experiencia es vivida “como sí“ fuésemos tragados por dicho plano.
LEY DE LA OPOSICIÓN DE FUERZAS
Este principio afirma que dentro de la Matriz existen fuerzas en oposición, ya sea en un nivel horizontal como vertical. Esto lo veremos en detalle en el capítulo respectivo.
LEY DE LAS DOS COLUMNAS DEL TEMPLO
Dentro de la matriz de siete niveles existen dos columnas. Cada una de ellas está en uno de los extremos de los planos. Una de ellas representa la energía negativa, la otra representa la energía positiva. Cada columna está apoyada dentro del plano primero y asciende hasta el plano séptimo. En cada una de las columnas el polo más denso, la vibración más baja se encuentra en el plano primero y la más alta en el séptimo. A medida que ascendemos por cualquiera de las columnas la vibración será más alta. Una en sentido positivo y la otra en sentido negativo. Una se dirigirá hacia la luz, la otra hacia el mundo de las tinieblas. La columna que vibra en sentido negativo representa a los siete infiernos, y la que vibra en sentido positivo representa a los siete cielos. Por esto a la columna negativa la llamaremos la columna del infierno y a la positiva columna del cielo. Así, en el camino de la evolución o de la involución el ser humano, a través de su manifestación en el mundo, tendrá la posibilidad de elegir cual será su camino. Variando sus vibraciones, subirá o bajará por una u otra de las columnas. De este modo si asciende por la columna negativa, sus actos lo llevarán hacia el mundo de las tinieblas. Si en cambio con sus buenos actos, asciende por la columna positiva, se dirigirá hacia el mundo de la luz. Gráficamente:
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